12 ideas para transformar tu dormitorio en una suite

Detalles que marcan la diferencia

La habitación es la estancia más personal de la casa y donde más cómodo tienes que sentirte. Por ello es importante incidir en cada detalle para conseguir transformar tu dormitorio en una suite que garantice un descanso pleno.

El dormitorio tiene que ser la estancia más cómoda de la casa, ya que es donde vas a descansar. También tienes que estar a gusto en ella, porque es la habitación más personal. Por ello, hay que tener en cuenta hasta el más mínimo detalle a la hora de decorarla. La distribución, el color, la cama, los suelos… Incluso elegir una mesita de noche acertada es importante. Y si estás pensando en transformarla, nosotros te damos las claves para transformar tu dormitorio en una suite de lujo.

La distribución

Antes de empezar la compra, hay que calcular medidas, ya que, aunque la cama es el mueble principal de la habitación, debemos tener en cuenta otros como las mesitas que la acompañarán, o el armario, por ejemplo. También hay que tener en cuenta la orientación: te aconsejamos que nunca sitúes el cabecero frente a la ventana o detrás de ella, así evitarás posibles molestias de luz.

El suelo

A todos nos gusta ir descalzo por la casa y pisar un suelo caliente y cómodo. Y en el dormitorio aún más. Por ello, te recomendamos que escojas suelos con materiales cálidos como la madera, o textiles como la moqueta o alfombras acolchadas que adornen esta madera.

El color

El color es otro elemento clave en la decoración del dormitorio, ya que, dependiendo del tono, conseguiremos un ambiente u otro: para dar a tu estancia una sensación relajada y cómoda, elige tonos claros, suaves y cálidos. El beige, el crema o los colores pastel son ideales. Para generar un ambiente natural que nos recuerde al mar, podemos utilizar tonos grises, verdes o azules. Para evitar el agobio o el estrés, no utilices colores chillones o muy vibrantes.

La cama

La cama es la pieza clave del dormitorio y sobre la que gira el resto del mobiliario. Por ello, debes hacer una apuesta segura en ella. No escatimes en gastos referidos al colchón, el somier y la almohada, ya que, se trata de encontrar un lugar donde descansar cómodamente, no dormir encima de una piedra. Los colchones de látex y viscoelásticos son los más versátiles.

El cabecero

Puedes jugar con la altura del cabecero: cada vez se llevan más altos y rectos, aunque es recomendable no abusar de esto, ya que puede desentonar con tu dormitorio. En cuanto a estampados, puedes forrarlo con materiales como el cuero u otros textiles. Si prefieres una opción más vintage, puedes elegir un cabecero de rejilla; si quieres romper con lo clásico, puedes incorporar a tu estancia un cabecero con cajones o estanterías, que, además de resultar útil, es toda una modernidad. Aunque, si quieres huir del típico cabecero, hay otras opciones: puedes entelar toda la pared del cabecero, empapelarla o cubrirla con un panel de madera.

Las mesillas

La mesilla debe encajar a la perfección con la cama, por ello es importante tenerla en cuenta. Lo que te resultará más útil a la larga es hacer las mesillas a medida. Los tamaños más comunes varían de los 30 a los 60 centímetros de ancho.

La ropa de cama

La ropa de cama es, además de una pieza clave en decoración, un elemento que garantiza el descanso. Y si tienes un sueño ligero o te cuesta dormir, debes invertir en calidad. Para que ello ocurra, escoge una ropa mullida, como las fundas nórdicas, y unas sábanas de 100% algodón. Con ello tendrás un descanso asegurado.

Crea un vestidor

Otra de las claves para transformar tu dormitorio en una suite es añadir un vestidor: si tienes espacio, sepáralo con un tabique o en una habitación adyacente al dormitorio. Si no tienes una habitación de sobras, los armarios en línea son los más prácticos. Y cuantas más baldas tengan, mejor. Así puedes meter toda tu ropa y conseguir un dormitorio ordenado y limpio.

Un tocador

El tocador le dará a tu estancia ese ambiente sofisticado para transformar tu dormitorio en una suite. Para crear un ambiente clásico o vintage, elige muebles antiguos, con tonos desgastados, y un enorme espejo recto o curvo. Añade elegancia con frascos o floreros de cristal.

Las ventanas

Añadir un buen textil a tus ventanas es otro elemento clave para transformar tu dormitorio en una suite. Para ello, las telas vaporosas con caída, como el hilo, el algodón o el lino, son un acierto seguro. Elige también tonos claros para dichas cortinas, que permitan el paso de la luz y generen una sensación de mayor amplitud.

La luz

Aquí es importante tanto la luz natural como la artificial. Si hablamos de esta última, deberemos aportar luz desde tres puntos básicos: desde el techo, para iluminar toda la estancia; añadiendo únicamente luces en las mesillas, para crear un ambiente más íntimo; o utilizando lámparas con fluorescentes, para darle a tu estancia un tono cálido.

El baño

Tener una habitación con baño es otro de los aspectos que transformarán tu dormitorio en una suite. Puedes separarlo con un muro a media altura, un panel de cristal o una puerta corredera.  Otra alternativa para aislar el baño del dormitorio es añadir un escalón que sitúe ambos espacios en distintos niveles.

Si necesitas más ideas para convertir tu dormitorio en la estancia más glamurosa y cómoda de la casa, echa un vistazo a nuestro catálogo. Allí encontrarás la pieza de mobiliario más cómoda y elegante para tu suite. Porque en Abbiamo360 diseño y comodidad van de la mano. Sé único, sé diferente, sé Abbiamo360.

Fuente fotográfica: Pinterest